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Cómo cuidar tu orquídea

  1. Regar la planta de Orquídea siempre por la mañana
    Si el riego se realiza por la tarde o noche, se las está exponiendo a que se enfermen con hongos y bacterias.
    La cantidad de agua depende del medio de cultivo donde esté creciendo. Generalmente, el coco y las raíces de helecho o materiales similares necesitan menos agua, porque retienen bastante la humedad.
  2. Dar sólo la luz necesaria y suficiente a tu Orquídea
    Dependiendo de la especie que tengas, deberás conocer la cantidad de luz que necesitan. Si se conoce la especia, hay que darles una iluminación media y la misma Orquídea se encargará de informarte sobre si es mucha luz o poca luz. Generalmente cuando las tienes en condiciones de mucha luz, se queman o se ponen amarillas. Cuando le estás ofreciendo poca luz, las verás de un color verde oscuro.
  3. Revisar periódicamente a Tus Orquídeas para detectar problemas de plagas
    Esto es realmente importante. Hay que revisar las hojas, las flores y los tallos de tu Orquídeas por lo menos una o dos veces por semana. Con esta práctica simple estarás previniéndolas constantemente de cualquier insecto que quiera dañarla.
  4. Fertilización
    Lo ideal es un fertilizante de lenta liberación (son pequeñas esferas y se puede encontrar en cualquier vivero). Aplicación: una cucharada cada seis meses.
    Colocar una o dos veces por semana algún abono foliar tal como el 20-20-20 o alguno similar (consultas en el vivero).
  5. Transplante cada dos años
    Las orquídeas caminan por la maceta. Cada cierto tiempo, "rebalsan" y se salen del contenedor y es obligatorio cambiarlas de recipiente para que sus raíces no empiecen a sufrir y para que tu orquídea no pierda estabilidad.
  6. Corrientes de aire: enemigo!
    Algunas orquídeas simplemente no están adaptadas a la brisa fuerte a su alrededor. En este caso, esta brisa las deseca y las marchita rápidamente. Es importante evitar las corrientes fuertes de viento.
    A otras especies de orquídeas por el contrario, les encanta la brisa, haciéndolas desarrollarse y florecer muy bien.
  7. Asegúrate si Tu Orquídea es terrestre o no
    La gran mayoría de las Orquídeas no se siembran en tierra, son realmente pocas las Orquídeas terrestres. La mayoría de las que normalmente se encuentran en los viveros o que te regalan son "EPÍFITAS" (viven en las ramas de los árboles en la selva) y no requieren tierra.

Con estos consejos, podés disfrutar de tu Orquídea por mucho tiempo.